Una niña con dos osos. Tres salen a pasear. Junto a una princesa inquieta. No dejamos de cantar. El lobo busca a un cerdito. Tal vez lo logre encontrar. Para acabar, un rebaño. Cuatro no quiere saltar. Solo necesitaré orejas que me quieran escuchar estas historias y más, y más, y más…